sábado, 18 de enero de 2014

Micro crítica: Cate Blanchett salva la última película de Woody Allen

Portada
Múltiples críticos se han cebado con ella alegando que la historia es mediocre y poco original, mientras que otros la halagan por la estupenda interpretación de Cate Blanchett. Blue Jasmine tiene ese pequeño matiz: la adoras o la detestas.
En mi caso particular, mi opinión es un 'remix' de ambos bandos. 

Me gustó la película, muchísimo, pero estoy segura que fue más por la extraordinaria actuación de Cate Blanchett que de la historia en sí. La actriz eclipsó totalmente la trama, haciendo de ella la protagonista del filme. En un segundo plano, sin lugar a dudas, el gran abismo entre ricos y pobres, el blanqueo de capitales, la envidia con los propios miembros de la familia... 

Temas que en la actualidad están muy presentes, pero que siempre han estado ahí. 

Si hubiese visto el filme sin saber la dirección, estoy completamente segura de que no hubiese dicho Woody Allen. A muchos les ha pasado lo mismo, quizá acostumbrados a sus películas europeas, pero a mi personalmente, lo que más me impactó fue más al hecho de que le diese tanto protagonismo a un único papel (el cuál sostiene la película entera), cuando yo siempre he visto más en sus películas que el pilar fundamental es la trama, en todo su conjunto (de ahí a que le admire sobre todo como guionista). 

Pensándolo, tal vez de eso se trataba. No de la historia en sí, sino de que cada uno de nosotros pudiéramos sentir hasta la última gota de locura que transpiraba la protagonista. Es la única excusa que acuño a esta película, porque da mucho que desear. Dudo incluso que superase el siete (y no la creo merecedora de esa nota), pero no puedo ignorar el papelón que hace Cate Blanchett.
  
No puedo decir que es una película imprescindible, pero la recomiendo encarecidamente porque merece muchísimo la pena la actuación de la protagonista. Solo ella ha conseguido darle el toque adecuado al drama más banal.




No hay comentarios:

Publicar un comentario