'A veces ser una adolescente hace que quieras morir', Jenna Hamilton

Hoy vengo a hablar de una serie que sigo desde hace ya bastante tiempo y que considero que merece de tener un hueco en mi blog: La chica invisible.

Antes de comenzar, no es una serie para todos los públicos. Con esto no quiero decir que tenga mucho contenido sexual o sangriento, sino que va más dirigida a un público femenino que masculino, y especialmente adolescente. 

Ashley Rickards en su papel como Jenna

La serie gira en torno a una chica invisible llamada Jenna que como muchas niñas a su edad apenas tiene amigos en las redes sociales, no es alguien que se preocupe por la moda, es tímida y antisocial, y es señalada como marginada en el instituto. Todo esto se le une el rollo sexual que tiene con el chico más popular, Matty, el cual oculta su relación porque su estatus social se lo impide.  

Después de un accidente en el baño causado en parte por una carta que recibe criticando su forma de ser y su estilo de vida, los rumores hacen que se incentive la idea de que ha sido un intento de suicidio. Es por ello que empieza a ser observada por todos sus compañeros de instituto y es debido a este 'traumático' suceso precisamente el aumento de su popularidad. 

Ahora tiene que lidiar con todo lo que se le viene encima, que viene a ser el drama diario que significa ser adolescente.

Muchas personas no la consideran especialmente atractiva porque efectivamente pertenece a un género muy encasillado, pero tiene varios puntos a su favor que hacen que sobresalga de ese saco. La clave de esta comedia es el guión y el elenco de grandes promesas que han conseguido reunir. Otro punto es el ritmo con el que enlazan unos episodios con otros, sin resultar nunca pesado, en gran parte por el tiempo de duración de los mismos (aproximadamente unos 20 minutos). También tiene su parte negativa que sean extremadamente cortos (o por lo menos para mí) y es que siempre me deja con ganas de más. Pensándolo bien, ¿no es una buena señal que una serie te deje siempre con un agradable sabor de boca y con ansias de ver la siguiente emisión?

Es verdad que ciertos episodios han dejado mucho que desear, muy flojillos a veces, pero por lo general es una serie muy entretenida y que puede aportar muchísimo al público que está dirigido. Te enseña valores y lecciones, y nos hace ver las consecuencias que tienen nuestros actos. Puede ser que sea la típica comedia de instituto, la cual constantemente hay enfrentamientos entre los populares y los que no lo son (que es así), pero no se queda ahí. Se puede observar a simple vista que la serie es bastante humilde y que no estiman en grandes recursos para lo que quieren transmitir. Aquí no hace falta un descapotable para saber quién es la más popular, ni que el chico más guapo del instituto sea un portento en todo lo que haga. Puedo afirmar que es una de las más realistas de todas las que he visto (más cercana que Gossip Girl sin lugar a dudas). Es fascinante ver como los personajes van avanzando con cada episodio... y tú con ellos.